En lengua nasa yuwe, “Kiwe” significa tierra. Una tierra regada con sangre y agua.
La sangre se ha derramado por más de quinientos años en el norte del Cauca, al suroccidente de Colombia. Y el agua, que es sagrada para la cosmogonía del pueblo Nasa, se ha convertido en un activo estratégico para los ingenios azucareros propietarios actuales de territorios ancestrales Nasa.
La lucha de este pueblo inició con la llegada de los españoles a América. A comienzos del siglo XX hubo levantamientos armados liderados por Manuel Quintín Lame y Juan Tama. A finales del siglo, una pequeña guerrilla étnica compuesta en su mayoría por indígenas Nasa se hizo llamar Movimiento Armado Quintín Lame.
Hoy los Nasa siguen en la lucha, pero sin armas de fuego y sin la bandera de la guerra. Las armas y la guerra quedaron proscritas de su territorio porque generan desarmonía.
Muchos miembros de sus comunidades han sido desaparecidos y asesinados como resultado de sus reclamaciones territoriales. Quizás la acción más política y sagrada que les ha costado la agresión estatal y del capital azucarero es la “liberación de la madre tierra”: un puñado de indígenas entra a un cañaduzal, rompe una mínima fracción del cultivo y sobre la tierra desnuda levanta cambuches y siembra semillas de maíz. La reacción del ingenio viene con la fuerza pública.
Al igual que el agua y la sangre, la coca es sagrada como en muchas de los pueblos indígenas andinos. El equilibrio de su relación con esta planta en el territorio se ve afectado por las acciones de grupos narcotraficantes que lo ven como un enclave lucrativo. Los Nasa, con su guardia indígena, realizan labores efectivas de control territorial con el fin, entre otros, de desarticular la economía del narcotráfico.
Cada año, durante los meses de julio y agosto, los Nasa consagran las semillas de sus alimentos en un ritual llamado Saakhelu Kiwe Kame. Es la partida del nuevo ciclo anual.
El verde y el rojo son los colores que representan la tierra y la sangre, son los colores que identifican a sus organizaciones políticas y son los colores que les dicen al ejército, policía, guerrillas del ELN y disidencias de las Farc, que el norte del Cauca es un territorio autónomo: la república de Kiwe.
“Hoy los Nasa siguen en la lucha, pero sin armas de fuego y sin la bandera de la guerra”.